Cierto que el arte con el que se realiza una actividad profesional, o el fruto final de todo ese proceso, catalogado en ocasiones como arte, se puede trasladar a muy amplios ámbitos de la vida.
En esta ocasion me refiero al "renacimiento" del talento, al humanismo, a ese interés por conocer y mejorar al ser humano con el trabajamos a diario codo con codo. Ese arte de reconocer la necesidad de crear bibliotecas físicas con manuales actualizados y al alcance de los miembros de la empresa y el equipo. Algo a lo que no se está muy acostrumbrado.
Este hecho en un departamento o en una compañía, ayuda a diferenciar al buen jefe, a un buen lider. Todo aquel que utiliza toda la paleta de colores de su sector y los deja utilizar a todos sus talentos, anima a que todo el grupo tenga ideas, las aporte, tengan sugerencias al respecto y, por supuesto, las ejecuten sin trabas, críticas, ni envidias posteriores.
Un talento culto, actualizado y cultivado convierte al equipo y a la empresa en unos entes fuertes. Como leí hace un tiempo en un libro* "la cadena es tan fuerte, como lo es el eslabón más débil". Por ello, el arte debe verse como un medio en la empresa. ¡Aprendamos todos a utilizarla!
* El Club del liderazgo
